Supongo que fue tu ausencia. Me dijeron que te gustaba leer... En casa había libros : el tesoro de la juventud, diccionarios de español y políglotos. Me habré propuesto, desde que "no me acuerdo", una cercanía, apropiándome interiormente de las cosas que amaste. Y luego contarte cómo siguió la vida sin vos. Cómo, igual, tuvimos que construirnos una vida. Cómo, algunos, no lo lograron. Construí mi vida, a veces, con mucha apatía, soledad, enojos, tristeza. Un hije es para siempre, pero también lo es una orfandad. No. Esa palabra nunca pude pronunciar.